Os comparto una receta, de la que siempre me habla Almudena (una compañera)como una comida especial y que a ellos les encanta , y a su peque más.
Yo aún no la he probado, pero tengo muchas ganas de hacerla, porque tiene una pinta buenísima sin decir, de lo sana que es , ya que contiene mucho hierro y Vitamina C.
Podéis hacerla sin necesidad de usar ingredientes veganos, es decir, el harina puedes usar de trigo en vez de garbanzo al igual que la nata, que puede ser normal.
El acompañamiento ha esta delicia puede ser una sidra de Potes , un vino tinto…pero yo la aconsejé para ésta ocasión que probase la nueva incorporación a la Tienduca, el vino blanco de uva Riesling Yenda, viñedos situados en los Valles Pasiegos, para tomar frío, cerrar los ojos y disfrutar.
Ingredientes para 2 -4 personas
- 500 gramos de brócoli
- 1 unidad(es) de puerro
- 1 pizca de nuez moscada(opcional)
- 1 pizca de pimienta negra
- 100 gramos de champiñón
- 2 cucharada de harina de garbanzos o trigo
- 1 pizca de ajo en polvo
- 200 gramos de nata vegetal o normal
- 125 gramos de masa brisa o masa quebrada (Una lámina).
Preparación:
1. Extendemos la lámina de masa quebrada o brisa ,sobre el molde que vayamos a usar. Y la horneamos a 180 grados durante 5 minutos.
2. Mientras, coceremos el brócoli unos minutos, cuando esté blando ,lo sacamos. Pinchar con un cuchillo para saberlo.
3.Picamos el puerro y los tallos grandes del brócoli y lo ponemos en la sartén a pochar a fuego lento.
4. Cuando esté casi pochado, añadiremos los champiñones cortados en láminas, rehogándose unos minutos. Salpimentaremos y echaremos las especies.
5. Mientras ,en un vaso con agua, añadiremos 2 cucharadas de harina de garbanzos, removeremos hasta tener textura de huevo batido, sin grumos. Y pondremos un poco de vinagre para quitar el sabor a garbanzo.
6. Mezclamos la nata vegetal con el sustituto del huevo y removemos bien. Añadiremos la mezcla a los puerros , brócoli y champiñones y lo echaremos en la tartaleta de masa brisa o quebrada.
7. Horneamos a 180 grados unos 15 minutos. Comprobamos pinchando con un cuchillo que esté hecho por dentro.
Y lista para comer. ¡ Buen aprovecho!